Alguien tendrá que decir a esas activistas que confundir el activismo con arrojar salsa de tomate al famosísimo cuadro “Los girasoles” de Van Gogh es como confundir el culo con las témporas. Y que más que activismo es claramente vandalismo y estupidez a manos llenas.
Y alguien tendrá que enseñar a los vociferantes a convivir en el respeto y una elemental compostura, y que insultar al Presidente del Gobierno, que es de todos, mal que les pese, mientras no se demuestre lo contrario y se va a tardar en demostrarlo, como norma, el 12 de octubre, es otra gamberrada de mal gusto que ensucia el paisaje y cabrea sin sentido a gran parte del paisanaje civilizado. No es por nada, o por mucho, más bien, cambien, por favor, su repelente costumbre.
¿Nadie se atreverá a criticar con dureza, sin andar por las ramas, al alcalde de Vigo, y decirle que es obsceno, más en estos momentos, ese alarde de iluminación estratosférica en Navidad?
Alguien tendrá que educar en igualdad de género, en la casa familiar, la calle, el colegio, la universidad y en todo rincón del planeta, es muy urgente, frente a tanto machista suelto, y enseñar a respetar a todas las mujeres, como se respeta, o se debería, a la madre “mismamente”. Sabiendo como sabemos, casi todos, que la igualdad de género es reconocer la igualdad entre mujeres y hombres, y obrar en consecuencia. Y no otra cosa precocinada al calor de las neuronas mal organizadas.
“Hubo muchos profesores que me dijeron que yo no llegaría a nada”, eso le dijeron a Victoria García Ortega, natural de Carballiño, hoy maestra vocacional, que ha recibido el primer Premio de Excelencia. Enhorabuena. ¿Nadie dirá a esos profesores, qué linces, santo cielo, que no se debe descalificar a nadie de esa manera tan vil y torpe?
Y alguien tendrá que enseñarnos a usar con mayor frecuencia, palabras y expresiones como: gracias, perdón, pase Vd. primero, le cedo el asiento, vales mucho, encantado en conocerte,
enhorabuena
, felicidades, me alegro de que te vaya bien, lo siento, te acompaño, te acompaño en el sentimiento, dame un abrazo, toma este regalo, te quiero, y sí o no, cuando es lo más correcto y necesario..., y muchas más de esta índole y condición.Alguien..., más bien toda la tribu, desde el primero al último, sin que falte nadie a la cita, porque de la salud cívica estamos hablando, y todos sabemos, desde que nuestros padres y abuelos nos enseñaron que la salud es lo primero y principal, ellos se referían a la salud física, y nosotros la ampliamos a otros campos.
https://youtu.be/DPegnyLDBXI Camille Thomas – Gluck: Orfeo ed Euridice "Dance Of The Blessed Spirits" (Arr. by Mathieu Herzog)
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