Es bueno y saludable volver a los mismos sitios y lugares de siempre. Yo, como tengo adicción a volver sobre el carpe diem, pero sin olvidar jamás al ayer del que nos hizo y a la esperanza de un futuro mejor, hoy, ese volver al tema clásico se lo debo a la escritora Leila Guerreiro, que insiste, también ella, en el mismo tema, pero para hacer hincapié, una vez más, y dar importancia al pasado, a partir de un anuncio en una de las Universidades de Madrid: “Más now y menos yesterday” (Más ahora y menos ayer), pensando en el retroceso de los derechos adquiridos por las mujeres, gracias a la decisión del Supremo de los EE UU, anulando el derecho de la mujer a la interrupción voluntaria del embarazo, un derecho que tenía desde hace 49 años, lo que indica a las claras un retroceso brutal. Venimos de donde venimos y el pasado, para bien y para mal, pisa nuestros talones.
El pasado es malvado en las manos de Donald Trump y hasta ahora y aquí llegan sus destrozos, desde cuando colocó a tres jueces de los suyos, y para más inri, vitalicios, quien en su campaña de 2016 proponía castigar a las mujeres que abortaran y dejar sin efecto la ley.
También los talibanes, cuando regresaron, prometieron respetar los derechos laborales y sociales de las mujeres, y ahora no las dejan salir de casa sin acompañante y las obligan a llevar el burka, esa cárcel horrenda sobre el propio cuerpo.
A nadie se le obliga a divorciarse, a abortar, a decidir cuándo y cómo morir... y la furia y el ruido de quienes no respetando a los demás en sus libres decisiones pretenden entrar en la casa del vecino y decidir por él con ansias ilimitadas de catequizarlo, adoctrínalo, manipularlo y domesticarlo. Lo pasado está escrito, pero con líneas tan endebles que pueden ser borradas al menor viento, pero intempestivo, los derechos adquiridos pueden irse de un plumazo por gente recalcitrante amiga del pasado por encima de todas las cosas y lo que un día significó progreso puede irse al traste en menos que cantas una nana. Lo estamos viendo, así que defender con uñas y dientes lo conseguido con sudor y lágrimas sigue siendo una de las tareas imprescindibles para seguir progresando y beneficiándose de los derechos adquiridos todo aquel que lo desee y esté a gusto con ellos.
Está claro, e intento que no se me olvide: el ayer nos sigue y nos persigue, nunca acaba de morir, no hay que cerrar los ojos al pasado, y menos que nada cerrarlos en el presente, siempre en el filo de la navaja, estando a la expectativa para no doblegarse dejando que los demás decidan por nosotros quebrantando nuestros valores más queridos, porque en cuanto nos descuidamos nos dicen que la tierra es plana y pretenden arrebatarnos nuestros derechos más preciados conseguidos a base de lucha, y obligado soñar en el futuro con realismo y deseos de mejora.
https://youtu.be/s1PN-P7rYo0 Núria Feliu canta l'havanera "El meu avi" a la plaça d'Osca de Sants (2001) Falleció el viernes pasado a los 80 años, icono de la canción catalana.
https://youtu.be/6bIOZPS3DIM Núria Feliu canta "Quin mal hi ha?" d'Apel.les Mestres
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