lunes, 2 de marzo de 2020
LA CAMA NO ES MAL INVENTO
La cama. Para una vida confortable y dichosa es difícil imaginarse nada mejor y mayor invento, y principalmente los primeros minutos en los que ves los cielos abiertos y el alma relajada. Qué felicidad, que quietud, qué manera de descansar a lo ancho, a lo largo y a lo extenso. El cuerpo se cree el dueño de todo lo creado y el alma comienza a navegar por el mejor de los mundos y el más apetecible de los sueños. Y no deja de ser un pequeño invento, como para felicitar con entusiasmo al primero que se le ocurrió, si bien es verdad, no vino de repente, porque fueron muchos siglos de pequeños adaptaciones y mejoras que fueron poniendo su punto, hasta que llegó la cama, tal y como la conocemos en estos momentos. ¿Qué nos enseña esto? Bien claro. Que nada nace por generación espontánea y que todos podemos, y así lo hacemos, ir aportando nuestro vaso de agua a la sed del mundo, nuestro granito de arena para que las playas sean más y mejores playas, estén más limpias y el paseo y los juegos de los niños encuentren el sitio ideal. Que entre todos, en grupo y en equipo bien ejercitado, hacemos infinitamente mejor las cosas, y cuando nadie se escaquea podemos brindar en común por lo conseguido. No hay nada mejor y más eficaz que un liderazgo compartido, sabedores de que todos, en algo, podemos ser estupendos, y hasta me atrevo a decir que un pelín geniales, dejando al lado el genio-genio que sale muy de tarde en tarde. No nace un Miguel Ángel o un Mozart cada mañana.
La cama, y el tresillo para la breve siesta no se queda atrás, sobre todo los primeros momentos cuando te preparas a quedarte plenamente dormido tras el sonsonete de la tele. A la media hora, mejor si no es más, la siesta breve-breve, y de nuevo a la tarea, para mí a escribir, creo que ya he dicho que es mi hora preferida para el parto, aunque parezca una hora insípida. Cada uno tiene sus sanas costumbres y sus momentos. Aunque a decir verdad, nada en comparación con la cama-cama. No hay color. A cada uno lo suyo. Y si alguien, antes de ir a dormir, te ha deseado felices sueños, ya es el colmo de la dicha.
En la breve biografía que dedica, a Frida Kahlo, Rosa Montero, en su libro “NOSOTRAS. Historias de mujeres y algo más”, comienza de esta manera que se me antoja enmarcar: “No sabemos prestar la debida atención al importante papel que la cama juega en nuestras vidas. Nacemos en una cama y morimos en otra, y la mitad de nuestra existencia transcurre dentro de ella. La cama cobija nuestras enfermedades, es el nido de nuestros sueños, el campo de batalla del amor. Es nuestro espacio más íntimo, la guarida primordial del animal que llevamos dentro. Para Frida Kahlo. la pintora mexicana, la cama era todo eso y mucho más: refugio, potro de tortura, altar sagrado”.
Pues eso, que si estás a punto...: ¡FELICES SUEÑOS! Y con este vals de fondo: un sueño feliz asegurado.
... https://youtu.be/VUF9g9V-Ang Tchaikovsky:Waltz of the Flowers-Daniel Barenboim
Publicado por
ÁNGEL DE CASTRO GUTIÉRREZ
en
13:56
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