miércoles, 11 de marzo de 2009

BONDADES DE LA MADUREZ

Todos, a medida que vamos cumpliendo años, nos vamos dando cuenta, sin que nadie nos eche a la cara nuestras arrugas, del peso inexorable de la madurez, pero con harta frecuencia no profundizamos en las enormes ventajas y ganancias que se van acumulando, y cuando acudimos a los sabios nos dan las grandes lecciones que nunca deberíamos pasar por alto, más aún, como alumnos aventajados sería bueno tomar nota e intentar aprobar con sobresaliente cada uno de los aspectos de sus magníficas investigaciones que ponen las cosas en su sitio.

Uno de los capítulos del reciente libro Por qué somos como somos del extraordinario divulgador, Eduardo Punset, sobre los últimos avances de la ciencia: la biología, la neurología y la psiquiatría, entre otras materias, lleva por título precisamente Bondades del cerebro humano y que yo he preferido modificar levemente, pero no sin seguir su pensamiento y el de los investigadores y científicos a los que entrevista el autor.
Si bien es verdad que con el envejecimiento se produce un cierto deterioro cerebral, constatan estos sabios actuales, sobre todo en lo concerniente a la memoria inmediata, no puede decirse lo mismo de la memoria acumulada que compensa con creces las pérdidas de la otra parte del cerebro.

Y así el neurocientífico, Arnulfo Romo, se atreve a arremeter contra el sentimiento de lástima, a veces, diría yo, de cierta rechifla, de los jóvenes, cuando se fijan solamente en algunas de sus funciones desminuidas y se pierden el espectáculo prodigioso, de cualidades como la adaptación, la plasticidad y la finura de su mundo interior y el de sus conductas hacia fuera. Existen personas mayores a la vuelta de cualquier esquina con los ochenta bien cumplidos y los noventa y muchos que demuestran una lucidez envidiable a la hora de exponer su pensamiento y su visión de la vida y la actualidad con razones de mucho peso y argumentos maravillosamente trabados.

Perdemos muchos cientos de neuronas a medida que avanzamos en edad, pero como tenemos una reserva multimillonaria resulta no ser tan importante la pérdida, porque se rentabiliza con la edad multitud de datos, crece la capacidad de atención, el cerebro se educa a sí mismo, y la memoria tiene tanto que escoger del largo trayecto de vida vivida, desde la elaboración de los recuerdos teñidos de afectos y coloraciones que aporta la fantasía y la imaginación creadora, que en comparación con la memoria rápida y precisa de los jóvenes, hay que seguir sosteniendo que en la madurez los tesoros que encierran los años tienen mucho mayor fundamento.

De igual forma reconocen estos investigadores que la madurez es compatible con niveles de felicidad más elevados que en la juventud, lo que viene a dar la razón a multitud de personas que sostienen que en los sesenta y los setenta y más están viviendo la mejor etapa de sus vidas.
El ayer no ha muerto del todo y nos sigue los talones, y es precisamente de ese largo archivo de la memoria de donde saca el adulto el peso específico cercano a la plenitud que puede estar tocando con los dedos.

Uno de estos científicos, después de afirmar que las personas mayores ganan en sabiduría y conocimiento vital y así consiguen restarle importancia a los pequeños inconvenientes de la vida cotidiana, concluye su tesis de esta forma tan clara y realista: “Aquellas personas que se levantan por la mañana con un propósito vital, con actividades y objetivos a los que enfrenarse, son generalmente más dichosas y saludables”.

Real como la vida de muchos mayores y toda una lección de vida para el que quiera contagiarse de ella.

5 comentarios:

jubilación viene de júbilo dijo...

¡Buenas noches! Acabo de empezar -ya jubilada- a hacer mis "pinitos" de creatividad y de informática. Te mando el"ensayo de blog", al que espero añadir cosas e ideas(si tengo tiempo).
Vaya esto como muestra de "psibilidades de la jubilación". Un saludo

jubilación viene de júbilo dijo...

Digo yo que tendré que mandarte la dirección del blog ¿no?.
jubilacionvienedejubilo.blogspot.com

ÁNGEL DE CASTRO GUTIÉRREZ dijo...

Muchas gracias por tus comentarios, y ahora que ya puedo localizarte, estaré al tanto de tu blog, abrazos y saludos.

Xoán González dijo...

¿Quien dijo la frase "Aquellas personas que se levantan por la mañana con un propósito vital, con actividades y objetivos a los que enfrenarse, son generalmente más dichosas y saludables”? Es bonito encontrarse estas afirmaciones con las que nos sentimos (tú y yo, e imagino que muchas otras personas por lo racional y evidente de esta constatación) tan plácidamente de acuerdo...

ÁNGEL DE CASTRO GUTIÉRREZ dijo...

Querido amigo Xoan: La frase es de Peter Ubel profesor de Psicología de la Universidad de Michigan de EEUU y es una perla que encontré en un espléndido reportaje de Sesenta y más, que me venía como anillo al dedo, para escribir mi artículo, después de leer el libro de Eduardo Punset.
Un fuerte abrazo