Hemos dado los últimos retoques al libro “50 años del Folk en Valladolid” para llevarlo a la imprenta en donde se hace un repaso pormenorizado y riquísimo de de estos 50 últimos años y sus protagonistas, músicos y danzantes, y me encuentro hoy con una noticia importante para la música.
¿Habías oído o leído alguna vez la palabra “sevdalinka”? Yo tampoco. Y la acaban de incluir en la lista del Patrimonio Inmaterial Mundial. Así que me he puesto a escuchar una canción de este género musical de los Balcanes, en concreto de Bosnia, pobre de mí, que desconocía totalmente.
Según Miguel Roán, estudioso del tema, “es un sentimiento entre amor, anhelo y melancolía. Es un reflejo de la sangre negra o de la bilis (negra), inspirado por el estado de ánimo del intérprete desesperado o desesperada por el amor prohibido o no correspondido, en forma de balada o cantar romántico”. Conlleva un estilo ambivalente fácil a la evocación, al combinar placer y tormento, alegría y amargura en una suerte de quema y catarsis, tanto en la parte musical como en la literaria.
Encierra en sí rasgos del flamenco, del fado y del blues con la cadencia musical balcánica.
¿Sabes lo que te digo? que esto que estoy escuchando lo incluiría con mucho gusto en el libro junto a los setenta y tantos grupos de folk de Valladolid de estos 50 años que celebramos con la publicación del libro que he tenido el honor y el inmenso gusto de coordinar con Jos y Miche, los hermanos Rivera del grupo Tahona y a la sombra del prólogo del maestro de todos, Joaquín Díaz, uno más en la aventura-histórica de estos 50 mágicos años.
Y puesto a soñar..., ¿para cuándo la música folk Patrimonio Inmaterial Mundial?
https://youtu.be/5W7_xIzZBIs?si=LouaX5Ic4NhS4MZS Djordje Balasevic - Sevdalinka - (Live) - (Narodno pozoriste, Beograd 04.12.2000)
No hay comentarios:
Publicar un comentario