Comienzo a cocinarlo y, cuando esté para presentarlo en sociedad, os lo iré dando a probar. Es mi nuevo Cuaderno Nº XVII, titulado: LECCIONES POR TODAS PARTES. Me pega que os voy a dar entretenimiento, y espero y deseo que algo más. Los primeros días, como una moto, pues no hay nada que te anime más como comenzar un nuevo cuaderno, una nueva aventura, nueva pradera para correr a tus anchas. Como si de comenzar un curso se tratara, no tanto para dar lecciones, pobre de mí, como recibirlas el primero, que para eso las escribo, leo, releo, corrijo y me las aplico, y si a alguien le vienen bien, de enhorabuena.
En cuanto abrimos los ojos cada mañana y la ventana para ver cómo asoma el día y se despereza, no hacemos más que recibir lecciones de unos, de otros y de todo lo demás, animado e inanimado, a poco que estemos con los sentidos bien abiertos y el alma de estreno, y así poder captar todo lo bueno que aflora y crece a nuestro alrededor.
Ahí lo tienes, una oropéndola, un tejedor común o un pájaro amarillo. Sin ir a la escuela, ese pajarillo, sea lo que sea, ha sacado matrícula de honor por haber construido su mansión de forma tan perfecta además de original. Primera lección.
Habrá que estar atentos y preparados porque las lecciones están ahí, al acecho, para ser captadas, para enderezar la plana, cambiar el paso, marcar otro ritmo, tomar lo que bien vale la pena, aprender un poco de humildad, porque cualquiera, el más lerdo, puede darnos sopas con honda en aquello de lo que ignoramos hasta lo elemental, dar con el mejor de los caminos, elegir aquello que te va como pintado y a tu medida, saborear lo que está cocinado con esmero y profesionalidad y aprender de los maestros, todos somos maestros en algo, las orientaciones que aun sin querer nos muestran, ah, y sin olvidar que todos los seres, pájaros, perros, hormigas, elefantes y ríos son buenos espejos en donde mirarnos y aprender de lo que son, de sus habilidades y cómo se comportan. Y no digamos los humanos, y dado que abunda lo bueno y lo malo, intentaremos fijarnos en lo primero y tratar de extraer las lecciones que bien merecerá la pena aprender, admirar y valorar. Deseadme buen viaje, yo os deseo el mejor de los aterrizajes en este mi territorio al que entrego gran parte de mi pasión y mis mejores herramientas.
Nota no tan al margen: Los artículos de este Cuaderno serán muy breves, bastante más de lo acostumbrado, que lo bueno si breve..., y me da que tenemos cuaderno para rato. Sale mucha lección al paso por los caminos que transito.
https://youtu.be/Qb_jQBgzU-I Mozart "Eine kleine Nachtmusik" I. Allegro. (Para comenzar con buen pie, nada mejor que Mozart, creo yo).
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