lunes, 6 de octubre de 2014

PIEDRA Y VIDA




Hay imágenes geniales y ésta es una de ellas. Escultor, herrero, con alma de poeta, un creador que de la nada, o mejor, apenas nada: unas piedras, unos hierros... y dejándose llevar por su inmensa imaginación creadora logra dar alma, y qué alma, a seres sin ella.
Y cobran vida, tiempo y espacio, ternura y diálogo, y tensión en el espectador obligado a preguntar e interpelarse.
La vaca de pie mira, contempla y vigila, mientras que la que yace tumbada descansa pacífica sabiéndose acompañada. Y sin darse cuenta están creando un rincón del mejor de los paraísos. Ellas no son conscientes, pero nosotros, por fortuna, sí, y podemos, si queremos, recrearlo.
Hay imágenes que están pidiendo, al menos, una palabra.

No hay comentarios: