jueves, 19 de julio de 2012

¡OJO A LOS BEST SELLERS! - NO ESTAMOS PARA PERDER NI DINERO NI TIEMPO



Estoy cabreado e indignado porque siento que me han tomado el pelo con un best seller al uso, su título para que no piques y pierdas dinero y tiempo se titula: EL ABUELO QUE SALTÓ POR LA VENTANA Y SE LARGÓ. Tiempo perderías, si te metes con él, pero dinero no si me lo pides, porque te lo puedo dejar e incluso regalar. Piqué por el título y porque en un  programa de la radio, dedicado a los libros, lo recomendaron, no sé si haciendo caso de la solapas en donde se dicen tonterías al por mayor, a mi gusto, perdón, tales como que “hace mucho tiempo que no me reía tanto leyendo un libro”, y yo lo tuve que dejar a la mitad sin que se me moviera un músculo dispuesto a la sonrisa; “un libro increíblemente divertido que provoca alegría” y me sigo diciendo: qué barbaridad, dónde encontrará esa gente la alegría que yo no veo por ningún lado, sino mala, muy mala literatura, simplona y pedestre, sin una buena descripción ni un elemental análisis de los personajes, porque estos no son más que marionetas de polvo y paja en las manos inexpertas de alguien  al que le falta casi todo para ser un buen escritor, lo siento, amigo sueco, porque el autor es sueco y se llama Jonas Jonasson, porque si se llega a llamar José García, otro gallo nos cantaría, no hubiera vendido una rosca y nadie se hubiera atrevido a publicarlo. Está visto que los suecos están de suerte; “hay mucha sabia ironía dirigida contra los grandes personajes de la historia” y difícilmente se pueden leer cosas más simples y sin gracia alguna como los encuentros variopintos y estrambóticos que el protagonista tiene con  Primo de Ribera, Franco, Stalin, Churchil...; “con esta odisea de un abuelo subversivo...”, por favor un respeto por la Odisea y otro respeto por la subversión, porque lo que le viene al azar a este abuelo de polvo y paja, insisto, ni es odisea ni subversión de nada, sino accidentes de tres al cuarto, rocambolescos y faltos de imaginación, que esta no es la tonta de la casa de la que se pueda abusar sin ton ni son; “el viejo canalla es uno de los mejores héroes que nos hemos encontrado en mucho tiempo”, por favor, esa aseveración daña a la inteligencia, porque el viejo es un personajes de trapo.

Menos mal que he cambiado rápidamente de tercio y me estoy metiendo con el Nobel sudafricano, J.M Coetze, que en el momento que te adentras en su mundo literario te topas con  una literatura excelente, Verano es el título y su estructura muy original, interesante e inteligente; y me esperan a la puerta, para releer, El viento de la luna, de mi admirado Muñoz Molina, un Homenaje-ensayo sobre uno de mis poetas preferidos, José Hierro, que me acaba de regalar mi amigo Óscar y el libro último de poesía de Juan Carlos Mestre que he encargado a mi librería, La bicicleta del panadero, del que me ha dicho mi amiga Mª Jesús Prieto, que es una preciosidad, ella tiene debilidad por el poeta berciano, y él la amabilidad de prologar mis humildes versos. Me fío.

Y lo dicho, si tienes interés o curiosidad te dejo o te regalo la novela del abuelo centenario, y no me digas que algo tendrá para que se hayan vendido dos millones de ejemplares, ¿y qué?; y no insistas en que no voy a tener razón yo, un mindundi cualquiera, frente a esos dos millones de lectores, algunos de ellos apasionados y que se han reído a mandíbula batiente, porque no me apeo de lo dicho y apuesto a que en una crítica mínimamente objetiva no alcanza un dos de puntación, del 0 al 10, claro; y no me digas más, porque me he cabreado e indignado por el robo del tiempo y del dinero y no estamos para malgastar tontamente el tiempo cuando hay tantos libros espléndidos a la espera e imbécilmente el dinero en tiempos negros de crisis profunda y larga. Insisto: un libro mediocre. ¡Qué pena de abuelo!

6 comentarios:

Hutch dijo...

Me pasó lo mismo con "Maldito karma", aunque yo no llegué a comprarlo, lo saqué de la biblioteca: tengo pavor al best seller. Saludos.

Gaude dijo...

Mi opinión para el bibliobús.
Después de agradecerle muy sinceramente su invitación a la lectura de “EL ABUELO QUE SALTÓ POR LA VENTANA Y SE LARGÓ”, de Jonas Jonasson, debo decirle que, después de varios intentos, no he conseguido pasar de la página 169.
Reitero mi agradecimiento pero no entiendo el mérito del BEST-SELLER.
Gaudencio Busto García


En la última visita que nos hizo la biblioteca rodante que regularmente nos acerca la cultura a los pueblos de Valladolid y por no estar disponibles los títulos que yo solicité, el bibliotecario, muy amablemente, recomendó este best- seller, y otros títulos, a Maribel, en la seguridad de que me encantaría leerlos. Bueno, pues este es el resultado.
El libro, que está esperando junto con otros, y la nota de más arriba, para su devolución en la próxima visita de la biblioteca rodante, lo tuviste a escasos tres metros no hace muchas fechas. Siento no haberlo comentado. Yo sobre el tema, y dada mi insuficiente formación literaria, no puedo decir más que no soy capaz de leerlo, no es mi lectura preferida.
Un abrazo

Rut dijo...

Tomo nota.
Ahora que vuelvo a tener tiempo, volvía yo a retomar mis lecturas y fíjate, que el título me llamaba la atención.
Menos mal, porque detesto dejar un libro a medias.
Apunto las recomendadas, alguna más?
Un abrazo
Rut

ÁNGEL DE CASTRO GUTIÉRREZ dijo...

Para Rut que pide más recomendaciones, aun a sabiendas de que ello es muy subjetivo. Destaco de los últimos dos o tres años: La montaña mágica de T. Mann. Los enamoramientos de Javier Marías. La noche de los tiempos de A. Muñoz Molina. El lector de Julio Verne de Almudena Grandes. Caligrafía de los sueños de Juan Marsé. La casa roja de Juan Carlos Mestre...
Un abrazo a todos por seguir ahí.

mjesusprivil dijo...

Ayy... lo que me ha costado encontrar esta entrada!
Tienes que mirar la forma de añadir un índice...

Acabo de leer este artículo, y no he podido evitar una sonrisa...

http://www.sexenio.com.mx/columna.php?id=4481

Ya me dirás... jejejeje.

ÁNGEL DE CASTRO GUTIÉRREZ dijo...

Mi querida Mª Jesús, me mantengo en mis trece, y si te atreves con ella, no creo que se te ocurra, pensarías igual que yo, y creo que serías más dura.
Ah, un día de estos, si alguien me enseña a poner todas mis entradas, que ya son muchas, lo hago.