skip to main |
skip to sidebar
VENTANA 45
MJ Prieto
Desde la friolera de... ya más de veinte años,
vengo dedicándole a darle vueltas y más vueltas al tiempo, no precisamente al
de la metereología, sino al relacionado con los años, las edades, sus achaques
y ventajas, la cercanía a la madurez a
medida de ir cumpliendo muchos y la necesidad imperiosa de aliarse con el
cambio, la pasión por los avances, no acostumbrarse a lo hecho y la manido, ni
pasear por el mismo lugar, ni defender solo y en exclusiva cualquier tiempo
pasado, no rechazar de plano los avances de la ciencia, sino esforzarse en
adaptarse para no perder ningún tren, y
teniendo en cuenta las últimas investigaciones que han descubierto novedades
altamente positivas: que el cerebro mejora con la edad, que la mejor forma de
mantener el cerebro es salirse de la zona cómoda, los caminos trillados y
moverse en los asuntos de mayor complejidad y de una comprensión más profunda, que la neuroplasticidad es la
posibilidad que tiene el cerebro para adaptarse a los cambios y un largo
etcétera que quienes me conocen se saben de memoria como cantinela que me
persigue.
Por eso cuando
uno se encuentra con estas dos perlas no puede por menos de llevárselas a su
huerto de ventanas.
La primera es
del genial humorista, El Roto, y dice
así:
Los
combustibles fósiles se acaban... ideas
fósiles, en cambio, hay para rato.
La segunda del
tan
extraordinario como famoso científico, Stephen William Hawking:
La
inteligencia es la habilidad de adaptarse a los cambios.
No me digas
que no es para guardárselas en la mochila, para que nos ayuden tanto a
desterrar de nosotros las posibles ideas fósiles, que al menos nos rodean a
mansalva como si queremos estar aliados con la inteligencia, la urgencia de hacer
caso del sabio Hawking adaptándonos a los cambios como lema de vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario