lunes, 26 de abril de 2010

SÍ, PERO NO

• El franquismo es un hecho del pasado, ¡menos mal!, sí, pero su sombra es espesa y alargada: date un paseo por las ondas y algunos medios de comunicación y te darás cuenta de que sigue quitándonos la luz, una convivencia en paz y llevando a la judicatura a callejones con difícil salida. (Si le pones la música de fondo de un chiste de El Roto, mejor que mejor: “- Tengo una herida de la guerra que no me cicatriza. – ¿Pero si tú no estuviste en la guerra? – Bueno, es que la heredé de un antepasado”.

• Lo importante es leer, me dices, cuanto caiga en tus manos y como sea, sí, pero hay diferencias abismales entre la literatura que hace pensar y afina la sensibilidad, y la de usar y tirar, de fácil entretenimiento y acorde con la basura.

• Viajar, sí, naturalmente, pero nunca para patear ciudades, paisajes y monumentos y al volver recordar única y exclusivamente comidas, bebidas, cuchipandas y alardear de ellas.

• Contar chistes, faltaría más, le viene bien al cuerpo y al espíritu, cuantos más mejor, si mueven a la risa y logran la mejor carcajada, pero no a costa de que aflore lo rancio, lo chabacano, el lado miserable y machista y la mala baba contra lesbianas y homosexuales, ah, y saber distinguir los lugares, no es lo mismo la barra del bar que la sala de espera de una consulta médica, un tanatorio o una velada en el salón entre familiares, amigos y vecinos.

• Perdón sí, pero que se devuelva hasta el último céntimo robado, no se encubra al delincuente, se haga justicia, aquí y ahora, no dentro de 200 años y no se confundan nunca más pecado y delito.

• En calidad de Presidentes de Gobierno, los Presidentes pueden ser buenos, regulares y malos, está claro, pero en cuanto abandonan y pasan a ser ex-presidentes, salen de sus bocas, con harta frecuencia, un hartazgo de lindezas y simplezas que vomitan hasta las piedras, por decirlo a lo suave.

3 comentarios:

Hutch dijo...

Veo que continúan las entradas ambivalentes: "ni blanco, ni negro; sí, pero no". Está bien, sirve para limar asperezas, aunque a veces hay que ser tajante en algunos aspectos y mojarse.

Me ha gustado el punto que hace referencia a lo de los viajes, y es que cada vez nos encontramos con más gente que viaja para eso, para restregar por la cara a los demás todo lo que han visto, comido, bebido y... (no digo más, por vergüenza). El que menos me gusta es el punto primero: la sombra del franquismo es alargada, pero también de las barbaridades del otro lado de la contienda (como ya he comentado alguna vez). Toda esta historia, si lo pensamos bien, se ha vuelto contra la sociedad española, a la que ha crispado de manera inaudita y gratuita. Saludos.

Anónimo dijo...

¡Pues otra vez!
El franquismo -con Franco- quedó sepultado hace 35 años, eso es cierto, pero...

Querido Angelus: a mí no me han quedado heridas físicas ni de uno, ni de otro "bando", pero si en el alma. Tienes toda la razón al decir que en los dos "bandos" se cometieron atrocidades, pero uno aún lo sigue pagando y el otro sigue queriendo que se les trate como héroes. Algunos de los contendientes descansan en magníficos panteones y otros siguen por las cunetas del mismo país por el que lucharon, y eso no es justo.

Y lo peor de esto es que los vencedores aún se niegan a reconocer que, al menos, los vencidos son tan dignos españoles como ellos. El día que esto se reconozca habremos cerrado la herida que hoy sigue supurando. Así que restituyamos, publicamente,
la dignidad a los vencidos, démosles la sepultura que se merecen y después, sólo después, si es posible, demonós, aunque sólo sea la mano y la herida cicatrizará sola.

¿Nos vamos de viaje? ¡Pues vamos! pero si, al volver, no tengo a quien mirar hacia abajo, ya sea amigo o vecino, no vale la pena ir.

¿Leer libros? todos, ¿cómo sabría si no, el que debo tener al alcance de la mano y el que debo colocar en el último estante de la librería, donde ni la escalera llega?

¿Contar chistes? ¡Por favor! Hasta yo, que soy aburridísimo, los necesito.

¿Perdón? Sólo para aquel que lo pida. Porque si no corremos el riesgo de que nos digan..."¿y a usted quién le ha dicho que yo quiero que conduz..." Perdón que me iba por otro camino: ¿a usted quién le ha dicho que yo quiero que me perdone?

Y, señor De Castro: comprenda usted que cuando a un presidente
lo abandonan tiene que sentirse herido en su... no se qué.

Y si me lo permitís, seguiré.Pero si me lo permitís, como si no...Un abrazo

ÁNGEL DE CASTRO GUTIÉRREZ dijo...

Gracias, Angelus, por estar ahí, declarando tus gustos y tus matices y gracias, Sr. Anónimo, por esa larga parrafada, buen discurso con el que me identifico, y te digo Sr. Anónimo, porque me llamas Sr. de Castro y me hace gracia.
Un abrazo