¿DÓNDE ESTÁN LOS HOMBRES?

En mis correrías por los pueblos, hace unos días, aterricé en Montemayor de Pililla, para una charla en el marco de la Semana Cultural que organizaba la Asociación Cultural La Cantera. Ya había estado más veces y me recordaron que la primera vez hará 20 ó 25 años, y siempre mujeres la inmensa mayoría. Ahora no sé por qué pensaba que a medida que los tiempos van cambiando me encontraría esta vez con bastantes más hombres, y me equivoqué, de las cincuenta mujeres asistentes había sólo dos hombres y estaban porque me conocían bien y les apetecía verme. Pregunté al inicio un poco con cierta sorna: ¿Dónde están los hombres? Y una señora de la primera fila me contestó que estas cosas no les van, pero que a ellas las dejan asistir y con más sorna le dije que lo que faltaba, que ellas eran libres, quisieran o no quisieran sus maridos. Risas del respetable. Me lo pasé bien ante un público muy atento que no se perdía ni un detalle. El tema les iba: A partir de los 40 y más puede suceder de todo. Comencé para calentar el ambiente con la importancia de ponernos bajo la sombra alargada de los mejores y les cite a Obama y a Rita Levi:
El primero que está revolucionando maneras, la última: la edad de los hombres y mujeres que está eligiendo para su inmediato gobierno el más joven en torno a los 40, la mayoría de cincuenta y muchos, de sesenta y más y hasta un jovenzuelo de 81 años y la competencia y preparación por encima de lo demás, que contrasta con el orgullo de algunos de nuestros municipios en las últimas elecciones en los que sus ediles alardeaban de llevar en sus listas a jóvenes de menos de treinta, ante lo que no puede por menos de escandalizarme e irritarme, ya que desde siempre he puesto la competencia por encima de la edad. Siempre e creído que el mejor de los gobiernos debería estar compuesto por hombres y mujeres, jóvenes, adultos y mayores, siempre valorando lógicamente la competencia, lo demás son ganas de dorar tontamente la píldora a un colectivo, imitando al papanatas de turno de la juventud lo puede todo.
La segunda, Rita Levi, a la que sigo y persigo y cito con frecuencia, que está a punto de cumplir los cien años y declara que su cerebro está ahora mejor que cuando tenía 20, lo que no me extraña para nada y que lo fundamental es tener el cerebro en forma, intentar ayudar a los demás y mantener la curiosidad por el mundo. Estuvo en Madrid hace dos meses y dictó su conferencia sin papeles y sin tropiezos. Rita Leví.
Seguí hablando de la importancia de tener proyectos, siempre algo entre las manos, algo nuevo que llevarse a la vida y actividades para mantener ágiles y activos el cuerpo, la mente y el entorno en el que se mueven dejarlo mejor que lo encontraron. Ah, sin olvidar la importancia de buscarse amantes, claro, además del marido o la pareja: la lectura, la escritura, la radio, la tertulia, la asistencia a las Aulas, los nietos, las aficiones, los viajes, etc. etc. y tratarlos con pasión, porque aún hay tiempo, tiempo de vivir, de aprender, de crecer, de disfrutar, de compartir, de participar.
Dimos un repaso a algunos refranes malditos y frases negativas. Por ejemplo.
Frente al: De los 40 para arriba no te mojes la barriga, mójate lo que quieras.
Frente al: La mujer con la pata quebrada y en casa, tuya es la casa, la calle, la plaza, la vida.
Frente a: Ya tenemos hecha la carrera, nos queda más de media carrera y mucho más intensa y más rica si nos lo proponemos.
Frente a: Yo ya, yo sí. Con un sí rotundo, de afirmación y celebración, celebrando los años sin quitarse ninguno.
Terminé con una frase de Charles Chaplin: La vida es una obra de teatro que no permite ensayos. Por eso canta, ríe, baila, llora y vive intensamente cada momento de tu vida. Parece que les gustó, aplaudieron y me vine a casa más contento que unas pascuas.