... Eso es, quise detener el tiempo, como Josué al sol, para ganar la batalla, dando densidad y tarea a la semana, día a día, sin prisa, pariendo lentamente, intentando crear a toda prisa antes de que se vaya la vida.
Lunes
Todo comienzo tiene algo de estreno. Y con el lunes estrenamos semana, aun los que estamos jubilados, una semana diferente a degustar, hacer algo nuevo y distinto y saborear este estreno y lo que caiga por sorpresa. Que la faena nos sea leve y fructífera. Y si la noche nos coge cansados, el sueño será más profundo.
Martes
Ya se ha hecho el cuerpo a madrugar, y ya se encarrila la semana dentro de la normalidad, tan sana. Y yo con mi trabajo voluntario y tan gratificante: 1.- Por la mañana la sesión de los martes en la Residencia Cardenal Marcelo, y nos esperan a Xoan y a mí como agua de mayo. 2.- Taller de escritura creativa. De las cosas más estupendas que me han pasado en mis muchos años. Pues eso que ya está encarrilada la semana y, con ella, la vida. Desde ella tienen sentido los talleres y estos ayudan a darle sentido a la vida. Y no es un juego de palabras, porque el tema tiene su hondura.
Miércoles
Está en el medio de la semana laboral, hay que tomarse el trabajo en serio, merece la pena porque nos pasamos media vida en él y tontear, escabullirse, escaquearse... está feo, me parece a mí, y va contra uno mismo, además. Yo voy a intentar que el taller con el segundo grupo salga bien. Por ellas, en este son todas mujeres, y por mí. ¡Qué gusto trabajar con las mujeres!
Jueves
Jueves, en la mitad del camino de la vida, bueno, no, eso se lo dejamos a Dante Alighieri, solo de la semana: lunes, martes y miércoles ya son pasado, y está aún humeando el lunes, pero el tiempo no se detiene y es veloz como el viento, todo lo anterior es pasado y queda el presente, este jueves que puede dar de sí, ya verá cada cual, collige virgo rosas, coge doncella las rosas de tu juventud, antes que el tiempo airado lo convierta todo en polvo, ceniza, nada “y que la negra muerte te quite lo bailado”. Quedan por delante tres, que pueden ser, allá tú, allá yo, hermosos días haciendo que el futuro alargue nuestra estatura, en “profundidad y horizontalidad”, densa y alargada.
Viernes
Fin de semana a la vista, con precauciones, guardando las distancias y mascarilla en ristre, todo lo que Vd. quiera, pero esperando con rabiosa esperanza que esta pandemia de mil demonios no nos siga robando más besos, más abrazos, más caricias, más vida apasionada, porque ya está bien, que no somos cartujos, sobre todo los jóvenes, en quienes pienso con dolor. Que podamos ver, cuanto antes, por alguna rendija, alguna luz.
Sábado
Sábado, día grande y hermoso, sábado-sabadete..., pues aunque sea que no, siempre podemos sacar algún as de la la carta de la suerte, y suelen ser los sábados, sábados de gloria, sábados con un sabor y un color especial, los mejores días, con un fin largo de semana que nunca parece que se va a terminar. Y el carpe diem cobra más sentido. Pues eso: feliz sábado noche, y que dé de sí, lo que dé de sí.
Domingo
El domingo por la mañana tiene el sabor y el color del sábado de gloria, y mucha, pero la tarde se convierte en algo gris, insípido y hasta aburrido. Cualquiera otra tarde es preferible. No sé por qué será. Menos mal que mañana viene el lunes y comienza una nueva semana larga-larga para correr a tus anchas por la pradera de la vida y unas vacaciones bien ganadas.
https://youtu.be/Ub2ty1sHTnk Rozalén - El Paso del Tiempo
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